martes, 28 de febrero de 2012

¡QUÉ TEMERIDAD!



500 millas de Daytona
El pasado martes 28 de enero por la madrugada se celebró la que se conoce como ‘La Gran Carrera de América’, las 500 Millas de Daytona, celebrándose este año la 55 edición y siendo la más accidentada y la más maratoniana que se recuerda en sus 54 años de historia. En este lance, el campeón fue el piloto estadounidense Matt Kenseth a sus 39 años; consiguiendo su segundo título al no permitir que Dale Earnhardt Jr. le pudiese alcanzar en la línea de meta. La prueba tuvo lugar un día después de lo acordado, ya que la lluvia que cayó el domingo sobre el circuito donde se festejó la carrera, el circuito de Daytona International Speedway, estaba impracticable. Pero además la carrera también sufrió otro aplazamiento, que se detalla a continuación.

El accidente provocó un gran incendio
Corría la vuelta número 160. El piloto colombiano Juan Pablo Montoya, excorredor de la fórmula uno, sufre una ruptura en el tren trasero de su vehículo que venía molestándole desde la vuelta anterior reportando fuertes vibraciones. Tras comunicárselo al equipo por radio, entra en el pit line pero, al no encontrar ningún desperfecto en el coche, el equipo decide que continúe con la carrera. Cuando sale a pista para ponerse en la cola del grupo, el coche se rompe y posteriormente impacta contra un camión de secado, lo cual provoca una fuerte explosión y, seguidamente, un incendio que paralizó la prueba más de dos horas.

 

El vehículo, que iba cargado de combustible, explotó y generó  un auténtico infierno nunca visto en una prueba automovilística en Estados Unidos.



Juan Pablo Montoya
El piloto afectado confirmó, aunque salió ileso, que su casco resultó dañado por el fuego y le dolía un poco el pie derecho: "Me he golpeado contra un montón de cosas, ¿pero contra un camión secador? Mientras la carrera estaba parada por la señal de precaución, jamás", destacó Montoya. "Simplemente me parece muy extraño, porque cuando estaba hablando a través de la radio con el equipo, el coche giró a la derecha".

El accidente forzó a que el personal de mantenimiento después de sofocar el incendio limpiase toda la pista y le pusieran cemento para cubrir los desperfectos que se hicieron en el pavimento.

Fotografía subida por Kelesowski vía Twitter
Pero lo más impactante resultó ser  la intervención del piloto Kelesowski. Mientras conducía registró, sorprendentemente, el accidente sufrido por Montoya con un teléfono móvil. Brad Kelesowski, que llevaba dicho aparato dentro de su coche, no dudó un instante y empuñó el celular para sacar una foto del accidente. Acto seguido tuiteó lo sucedido y en sólo una noche registró la friolera de 100.000 seguidores en su cuenta de Twitter.

El temerario ‘reportero’ contó a los internautas lo que había sucedido e incluso respondió a algunos de ellos durante las vueltas ralentizadas detrás del Safety Car. Poco después, como cabe esperar, tuvo que abandonar tras sufrir otro percance. ¡Qué temeridad!

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